viernes, 29 de abril de 2011

La Izquierda >>>>>>>>>>>>>>>Reaccionaria



NUEVA EDICIÓN DEL CLÁSICO DE VÁZQUEZ-RIAL

'La izquierda reaccionaria'

Reseña de steban Lijalad
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Vázquez-Rial, además de escribir un libro importantísimo, tuvo la genialidad de crear el término izquierda reaccionaria, de extraordinaria fuerza: desmonta –con solo dos palabras– la mitología que iguala Izquierda a Progreso. La Izquierda no es el Progreso, nos dice, sino la reacción más consistente y feroz al proyecto liberal democrático.


Lo más llamativo de este libro es el punto de vista. Si algún pensador conservador hubiera escrito una crítica a la Izquierda, a nadie le llamaría la atención. Casi diríamos que estaría en su naturaleza. Pero cuando alguien proveniente de la Izquierda asume el desgarro que significa quebrar los mitos de juventud y exponer, al fin, las dudas y certezas que lo traspasan, el producto tiene un valor complementario. Sobre todo para los miles de personas que han vivido el mismo proceso.

Venía, como tantos otros, preocupándome por la situación de lo que hasta aquí se ha venido llamando izquierda, por la identidad de día en día más borrosa de ese sector del pensamiento, o del no-pensamiento, con el cual me identifiqué durante largos años, probablemente a falta de algo mejor. Intuía, más que veía, la miseria en la que había caído y seguía cayendo, como en un pozo de fondo remoto, pero no alcanzaba a precisar lo que la violencia de Al Qaeda reveló aquel día y los que le siguieron: que el pozo no tenía fondo y que la decadencia de las nociones que habían alimentado las visiones del mundo en general tenidas por progresistas ya no se iba a detener.

Vázquez-Rial, ya digo, no es el único que ha hecho ese tránsito. Somos miles los que hemos vivido el mismo proceso, aunque quizás de un modo discreto, sin la audacia y la brillantez de Horacio. De algún modo, él mostró el camino.

El punto de ruptura final fue, para él y para tantos, el brutal atentado del 11 de septiembre del 2001. Las sonrisas cómplices, las condenas meramente formales, la idea de que EEUU se lo había buscado, todo eso fue el detonante que muchos necesitamos para decir adiós, definitivamente, a los sueños de la Izquierda.

Lo que siguió al 11 de Setiembre fue un estallido. Una confesión pública de identificación con la barbarie, de repudio a la civilización y al pensamiento como tal, de repugnancia ante lo político, de tolerancia ante el terrorismo, y de cólera frente a la legalidad y la legitimidad de los Estados como marco de garantía de los derechos humanos.

Todo eso, y mucho más, quedó claro el 11 de Septiembre. La sustancia de La Izquierda Reaccionaria es el relato pormenorizado de ese estallido de irracionalidad: de cómo una hija de Occidente –la izquierda que nació en las jornadas revolucionarias del siglo XVIII– termina matando a su propio padre y se abraza a lo peor: el fundamentalismo religioso, el nacionalismo, la reacción. Es Roger Garaudy convirtiéndose al islamismo; es Carlos, el guerrillero internacional, aplaudiendo a Osama bin Laden. A eso ha llegado la jibarización de la izquierda: del anuncio de un futuro de libertad y justicia a la justificación de la matanza de inocentes.

Las claves de esta decadencia son analizadas por Vázquez-Rial con la sapiencia del arqueólogo, que analiza fragmentos dispersos para rearmar una realidad cultural.

- El reduccionismo de la autodefinición de la Izquierda: vendría a ser todo lo que se oponga la Derecha, un mosaico que abarcaría desde Churchill a Hitler, de Vargas Llosa a Trujillo.

- El abandono de la política democrática, en el sentido de lucha leal por el poder mediante la persuasión del electorado: atajos, golpes de estado, conspiraciones, guerras prolongadas.

- La asunción del nacionalismo como bandera propia, contra la tradición internacionalista de los fundadores.

– Cuba como el gran mito sobreviviente tras la Caída del Muro: "Las gentes de las izquierdas, las que hace cuarenta y dos años depositamos nuestras esperanzas de transformación en la revolución cubana –asumo mi parte–, debieran ser las más críticas, las más interesadas en que esa pesadilla no se prolongue. Si es necesario, reclamando el fin del bloqueo, pero con conciencia de que el final del bloqueo es el final del régimen, el más deseable, el menos sangriento de los finales. Cuba, su Mito, su bandera, es aun levantada por los restos de la izquierda, es una pesadilla (...) solo un cínico redomado puede decir que hay un principio que defender en Cuba, sea que se llame socialismo, sea que se llame igualdad".

– La pérdida de la noción de proceso, esa dinámica de la Historia que lo único que predica es que no hay un fin de la historia, que la Historia no se detuvo en la URSS o en China o en Cuba. La cristalización, el congelamiento de la Historia es una de las claves del fracaso de la Izquierda para comprender la dinámica de lo real.

La pérdida de potencia de fuego político e ideológico tras la desaparición de la URSS se compensa con el apoyo –explícito o soterrado– a la barbarie fanática representada por Bin Laden y su terrorífico atentado contra las Torres. Por interpósita persona, la izquierda (antiamericana, fanáticamente antiamericana, podría decirse) encuentra su nuevo guía. El que sea un líder fundamentalista islámico se considera un detalle menor. Como recoge Horacio, cierta dirigencia izquierdista argentina, a la vanguardia de la alianza Marx-Mahoma, planteó el carácter revolucionario de Osama.

Vicente Zito Lema sostuvo que Osama bin Laden era "un revolucionario", cuya lucha "es parte de la lucha de clases" de "los oprimidos de la humanidad contra el imperio". Lo comparó con José de San Martín, Manuel Belgrano, José G. Artigas [líderes independentistas de Argentina y Uruguay en el siglo XIX], Ernesto Guevara y "mis compañeros caídos en combate".

El Mito ya estaba construido. Y la izquierda es muy eficaz construyendo mitos. Es lo que mejor sabe hacer.

El estupendo capítulo sobre la multiculturalidad trae una síntesis brillante de las similitudes y diferencias de dos tradiciones que han influido en la modernidad: la iluminista (universalista, igualitaria, racional) y la romántica (irracional, particularista, exaltadora de las diferencias nacionales). De un modo muy claro, Vázquez-Rial demuestra que el romanticismo está en la base del antisemitismo:

¿De qué modo la noción de relativismo cultural, o de multiculturalismo, como se ha elegido llamarlo últimamente, está asociada al antisemitismo en particular, por la historia del Romanticismo alemán, y al racismo en general? La negación de la noción de humanidad, y su sustitución por la de un conglomerado de culturas, abre la brecha de la diferencia. Y el racismo no se construye sobre la superioridad o la inferioridad de una determinada raza: eso viene después, en segundo término: lo primero es la diferencia de esa raza respecto de otras. Para aceptar la idea de que los arios son superiores, o la de que los judíos son inferiores, tengo que aceptar primero que son diferentes. Es tan racista afirmar que todos los judíos son malos como afirmar que todos los judíos son buenos. O los árabes, o los chinos, o los sioux, lo mismo da. Al diferenciarlos, los separo de la idea de humanidad.

La izquierda nació bajo el espíritu del iluminismo, pero ha virado hacia el romanticismo: la multiculturalidad, el desprecio de la cultura occidental, la aceptación entusiasta de la diversidad cultural, incluyendo la ablación, el asesinato de adúlteras, la explotación de la mujer, la negativa de los inmigrantes islámicos a aceptar la legalidad democrática europea... Todo en nombre del "respeto por la diversidad cultural".

Nos dice el autor:

Las izquierdas han dejado de ser un proyecto porque ni tienen un modelo de sociedad socialista dignamente defendible, ni se han comprometido con la defensa del único sistema, el occidental, en el que les está permitido vivir.


El abandono de Occidente, de las libertades, de los ideales democráticos –con el pretexto de se habían difuminado merced al imperialismo y el capitalismo salvaje– no hizo más que acercar a la Izquierda a su supuesto antagonista:

Todavía hace falta más distancia, todavía hay adherencias en nuestro espíritu de una sentimentalidad bolchevique, que nos impide a quienes nos formamos en las izquierdas asumir la esencial identidad del comunismo y el fascismo como respuestas revolucionarias paralelas, con un origen común, con una parafernalia común, con una coreografía común, con un lenguaje común, con unos discursos comunes.

Identificar el comunismo y el nazifascismo como las dos caras de una misma moneda antiliberal, para alguien que proviene de la Izquierda, alguien aun adherido a la "sentimentalidad bolchevique", es una "audacia". Sabe que sus amigos lo tildarán de "facho", de irresponsable: buena parte del Mito Soviético se construyó con la "victoria sobre el nazifascismo". Y no es cuestión de derruir mitos.


Vázquez-Rial pone también bajo su lupa la política familiar de la Izquierda actual –muy distinta del puritarismo de los viejos anarquistas del siglo XIX–, la cuestión de la soberanía –ambiguo tema en el que la Izquierda duda entre su inicial internacionalismo y el particularismo de aldea–, la ecología como nuevo mito anticapitalista. Etcétera.

Culmina Horacio afirmando, a modo de síntesis:

La izquierda actual es un síndrome y una mitología. Los síntomas son el antiamericanismo como única filosofía central, la renuncia a las nociones de proceso, de soberanía y de Estado, entre otras, el multiculturalismo –que lleva al proislamismo acrítico y, en consecuencia, a servidumbres políticas e intelectuales perversas–, el antisemitismo, el nacionalismo, la manipulación de la memoria y de la historia, el desconocimiento de la realidad moral de ciertas prácticas, tanto positivas como negativas –la familia o el cultivo de opio–, las consignas que se repiten sin que tengan ya ningún vínculo con la realidad.

No hace falta acordar con todas las afirmaciones de Vázquez-Rial. Eso sería lo contrario de un pensamiento libre e independiente. Algunas tesis que sostiene mueven a la discusión, lo cual es bueno y sano. Solo los fundamentalistas creen en cada palabra del Libro. Los liberales, afortunadamente, tenemos muchas coincidencias y algunas disidencias, porque el liberalismo vive del intercambio, la discusión y el consenso.

Libertad Digital, Suplementos-Libros, 28.04.2011

HORACIO VÁZQUEZ-RIAL: LA IZQUIERDA REACCIONARIA. Linkgua (Barcelona), 2011, 264 páginas.

En soporte E-Book:

http://www.izquierdareaccionaria.com/comprar-libro

miércoles, 27 de abril de 2011

Ladrones en el Departamento Central de Policía





Dra. Andrea Palomas-Alarcón
03.03.2011


Se supo extraoficialmente que ha sido removido el busto del comisario Alberto Villar (1) que se alzaba en el patio de honor del Departamento Central de la Policía Federal Argentina.
También fueron retiradas de las comisarías, las placas de homenaje a los policías víctimas del terrorismo.

Pese a los insistentes comentarios del periodismo, el gobierno calla y otorga.
Aunque este gobierno ha derogado mi capacidad de asombro y en contra de lo que aconseja la estrategia del más elemental manual de guerra, acuso el golpe. Debo admitir que me dolió.

Soy hija de un comisario, nací en el Churruca. Allí fallecieron mi papá y mi abuelo. Aunque no soy policía, me siento parte de la familia policial y cada vez que se la ataca, siento el golpe en lo personal.
Después de ver desfallecer en las mazmorras del régimen a más de mil hombres, presos políticos, creí que ya nada podría conmoverme pero la artera maniobra de hacer desaparecer, una vez más, a las víctimas del terrorismo es demasiado.

Con la clandestinidad de lo que avergüenza, retiraron los homenajes de víctimas que les molestan, porque les recuerdan su origen violento, su violencia latente sólo sostenida por el temor de volver a perder una guerra.
Clandestinamente, a hurtadillas, como ladrones de placas en cualquier plaza pública, esconden su pasado asesino.

La palabra hurto viene del latín “furtum” que significa furtivo y esa es la forma en que hicieron desaparecer las placas que la Nación le rinde a sus mártires. En su descabellada empresa de reinventarse, desaparecen pruebas de la guerra perdida que ellos mismos empezaron.
No hubo ceremonia, no hubo un "general banquito" (2), no existieron anuncios. Silencio.
Los ladrones de placas del departamento Central de Policía y de las 53 comisarías de Buenos Aires se alzaron con el botín, ante todo un país boquiabierto que no atina a despertar.

Existen homenajes que los ladrones de todo no pueden hurtar, los que llevamos clavados en el corazón.
Personalmente, quiero recordar a la víctima del terrorismo más cercana a mí: el comisario Guillermo Pavón.

Era amigo de mi padre y venía frecuentemente a mi casa cuando era chica, lo recuerdo como un hombre gigante. Repasando fotos de felicidades antiguas, noto que era obeso, su peso lo agobiaba. Por su brillante carrera, la Policía Federal evitó darle el retiro, enviándolo a un destino calmo que pudiera sobrellevar su salud, era Jefe de Protocolo y Ceremonial de la Policía Federal Argentina.

Fue un hombre bueno, inofensivo, entregaba coronas de flores en nombre de la Policía Federal a los deudos de los policías caídos en cumplimiento del deber, asistía a los funerales, organizaba las entregas de medallas.

Una mañana, al salir de su casa una ráfaga de ametralladora lo partió en dos.
El ERP se atribuyó el atentado. Estaban construyendo un mundo mejor y para ello era preciso matar a un buen tipo.
La realidad es que algún trepador pagó su ascenso dentro de la guerrilla o alguna chica fácil quiso probarle al grupo que debía ser tomada más en serio, quién sabe cómo fue y ahora, a quién le importa. En esa época, todos creímos que el comunismo sería el futuro ominoso del mundo y los advenedizos no querían quedarse afuera.

Por la parte que me toca, como miembro de este país enfermo, les pido perdón a las víctimas del terrorismo. Ellos sabrán comprender desde el cielo este pequeño lapso de tiempo en que su homenaje fue borrado por un gobierno que pronto huirá de la misma forma en que los ladrones huyen cuando los persigue la policía.

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Notas de Termidorianos:

(1)
Comisario general Alberto Villar: por ser el oficial de la PFA más cualificado en Inteligencia sobre organizaciones armadas marxistas en la Argentina de los años 70', el presidente Perón le nombró sub-jefe de la fuerza en Enero de 1974. Según una versión nunca confirmada, también le habría encargado organizar un grupo contraterrorista irregular: la futura Triple A, dirigida políticamente por José López Rega, secretario privado de Perón desde sus años de exilio en Madrid. El 1 de noviembre de 1974 (siendo entonces jefe de la PFA), la organización terrorista Montoneros le asesinó, junto con su esposa, cuando navegaban por el delta del Tigre (Río Paraná). Biografía del comisario Villar.

(2)
Teniente general Roberto Bendini: en 2004, cumpliendo órdenes del presidente Néstor Kirchner, retiró el retrato del general Videla en el Colego Militar de la Nación. La esperpéntica fotografía del comandante en jefe del Ejército Argentino subido a un sillón, como si fuera un soldado o un civil del servicio de limpieza, dio la vuelta al mundo.

Fuente:
http://www.informadorpublico.com/0000113304.html


martes, 19 de abril de 2011

En el día de la Media Memoria



Previendo la velada circense del 24 de marzo, el Poder Judicial se apresuró a hacer bien los deberes. Niñitos obedientes, cejijuntos, bajan el martillo como si rompieran nueces.

Comunicado número Uno. El Poder Judicial decide…

1.- Condenar a Luciano Benjamín Menéndez y a Jorge Rafael Videla en la provincia de Tucumán por delitos de "lesa humanidad" en los que no estuvieron, ni pudieron haber estado involucrados.

2.- Absolver al comisario (1) Horacio Verbitsky y a un grupo de activos Montoneros por prescripción, por la bomba del casino de Coordinación Federal de la Policía Federal Argentina.(2)

Con rostros circunspectos y sin aflojar la comisura de los labios, los autodenominados "jueces" discurren que el terrorismo "común", no es delito de lesa humanidad, por lo tanto prescriben. Sólo lo es el que se encaramaba desde el Estado, en Falcons (3) con calcomanías "los argentinos somos derechos y humanos". Los otros son, escasamente, amateurs del terror; perdonables por su vocación aficionada. Armas soviéticas y entrenamiento cubano fueron, apenas, anécdotas de su tierna juventud maravillosa.

Convencidos de que el que gana escribe la historia, los vencidos de ayer, aporrearon la verdad durante décadas, hasta conseguir un Poder Judicial subordinado e inventarse una Constitución a medida, con Tratados y todo.

El Estatuto de Roma…

El bendito (o maldito, según el ojo derecho o izquierdo que lo mira) Estatuto de Roma introduce el delito de "lesa humanidad" en el ordenamiento jurídico argentino. De acá para adelante, lo aclara el mismo Estatuto, no para atrás. Son imprescriptibles los delitos de lesa humanidad que se cometan en el futuro.
Los niñitos obedientes se apresuran a apuntar que se aplica para atrás también. Son más papistas que el Papa. Complacen al Poder, cuidan sus carreras y sus futuras jubilaciones.

Irretroactividad ratione personae. 1. Nadie será penalmente responsable de conformidad con el presente Estatuto por una conducta anterior a su entrada en vigor." (Art. 24 del Estatuto de Roma).

El Estatuto de Roma entró en vigencia en la Argentina el 9 de enero de 2007.

Respecto de la sui generis teoría de la Corte Suprema de Justicia redimiendo al terrorismo del mote de "lesa humanidad", dice el Estatuto de Roma:

Artículo 7. Crímenes de lesa humanidad.

A los efectos del presente Estatuto, se entenderá por "crimen de lesa humanidad" cualquiera de los actos siguientes cuando se cometa como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil…

a) Por "ataque contra una población civil" se entenderá una línea de conducta que implique la comisión múltiple de actos mencionados en el párrafo 1 contra una población civil, de conformidad con la política de un Estado o de una ORGANIZACIÓN de cometer esos actos o para promover esa política.

Esta aclaración, específicamente incluye dentro de los delitos de lesa humanidad a los que se realizan desde cualquier Organización contra la población civil, para promover una determinada política, cualquiera, incluyendo las organizaciones terroristas. Así lo entienden los grandes juristas del mundo.

Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia tiene su propia Biblia y su propio calefón.

No debería extrañarnos. En más de doce oportunidades, la Corte Suprema de Justicia declaró constitucionales las leyes 23.492 y 23.521 (Punto Final y Obediencia Debida) para -luego- venir a validar la Nulidad que sobre éstas decretó el Congreso, cuando vientos del sur eran los que soplaban. Nulidad que se aplicó hacia atrás, también, fulminando sus efectos liberadores.

Si mañana gobernara el ratón Mickey, la Corte Suprema proclamaría que la Constitución es una gran horma de queso.

Esta modesta abogada, nada puede enseñar a los miembros del Supremo Tribunal de la Nación y demás inferiores, que ya no conozcan.

Estremece concluir que saben mejor que cualquiera, que lo que hacen es puro y simple prevaricato, y que les importa un legal rábano.

Dra. Andrea Palomas-Alarcón

Ciudad de Buenos Aires, 27 de marzo de 2011

http://www.informadorpublico.com/100200.html
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Aclaración a lectores no argentinos:

1- La autora utiliza el término "comisario", aludiendo a "comisario político". El tal Verbitsky era en la década del 70' sub-jefe del Servicio de Información de la organización terrorista Montoneros, y para los Servicios de Información policiales y militares de la época, fue quien planificó el atentado. Actualmente es el principal asesor ideológico de la presidenta Cristina Elisabet (sic) Fernández, de Kirchner; y preside el CELS, la más importante ONG argentina dedicada a la defensa de los Derechos Humanos.

2- Coordinación Federal: División de Seguridad e Inteligencia de la Policía Federal Argentina. En ese atentado de Montoneros murieron 23 policías y hubo varias decenas de heridos.

3- Falcon: modelo de automóvil FORD, generalmente utilizado por las fuerzas del Estado en sus operaciones contraterroristas ordenadas por el gobierno constitucional presidido por María Estela Martínez, de Perón.

domingo, 17 de abril de 2011

Pedadogía cubana en las escuelas argentinas



En la Argentina gramsciana del régimen Kirchner... libro del "Che" como texto escolar. Creando "bloque político" y "hegemonía ideológica" desde la infancia.
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Con tapa dura y vivos colores, su diseño no varía demasiado de lo que se ve en la literatura infantil. Pero el protagonista de este libro para chicos que ya se encuentra en las librerías no es ningún personaje de ficción sino el Che Guevara, cuya vida es contada de manera simple, con textos y dibujos que no hacen alusión a ningún hecho de violencia. El volumen podría pasar a integrar dentro de poco las bibliotecas de las escuelas primarias.

Che, la estrella de un revolucionario fue publicado por la Editorial La Marca, que con motivo de su 18° aniversario lanzó este año una colección para niños llamada La Marca Terrible. Los textos estuvieron a cargo de la autora y fundadora de la Editorial Marea, Constanza Brunet, y de Guido Indij, de la editorial La Marca.

"Decidimos sacar una colección infantil que iba a ser sobre libros de personajes de la historia, tanto nacionales como internacionales, y qué mejor que empezar con el Che", afirmó Indij, fundador de la La Marca.

En un visita a la feria del Libro de Fráncfort en 2009, Indij se topó con las ilustraciones del surcoreano Ju Yun Lee. El editor estaba en busca de títulos para su colección y "le encantaron los dibujos de Lee", contó Brunet. "Después se contactó conmigo, porque sabía de mi interés en el tema y que además hace unos años había editado un libro sobre los viajes de Guevara que se llamó De Ernesto al Che, escrito por Carlos «Calica» Ferrer", continuó la autora. El libro está dividido en dos partes. La primera es la historia del revolucionario Guevara contada como un cuento y combinada con frases del Che; la segunda tiene una biografía que "es para chicos más grandes, padres y maestros", dijo Brunet.

"Sabemos que la historia de Guevara es violenta y cruda, por eso dividimos el libro en dos partes, para que los padres puedan contársela a los hijos y que éstos no se asusten con el asesinato" (sic), añadió. El desenlace trágico de la vida de Guevara sólo figura en la biografía al final del libro. "Es un libro un poco revolucionario y vanguardista y que muchos padres y personas lo van a juzgar, pero los que lo lean y entiendan el concepto lo van a disfrutar", afirmó Indij.

"Vimos que la estrella de la gorra se repetía en muchos dibujos y surgió lo de la estrella de un revolucionario. Y fuimos jugando con la idea de los valores, los ideales que van guiando al Che. En esa primera parte nos manejamos con cuidado e hicimos varias escrituras, para llegar a los más chicos. No podíamos ir con una historia muy cruda", dijo la autora, a la agencia Télam. El estilo metafórico obedece, aclaró, a que el volumen está destinado a menores de 12 años.

Como el libro está en la calle desde hace unos meses, los autores tuvieron respuestas por parte de algunos lectores. "Las reacciones fueron diversas, recibimos mensajes en Facebook, Twitter y vía mail, tanto de personas que nos felicitaban como de otras que juzgaban de asesino al Che y cuestionaban su elección como personaje central de un libro para chicos", contó su autor.

"El Che es un personaje importantísimo tanto a nivel nacional como mundial. Todos deben conocer su historia, los chicos tienen que conocer su historia porque fue un hombre, que más allá de sus tendencias políticas, tenía ideales y es un ejemplo en cuanto a sus valores, a su compromiso con el bien común y a su solidaridad con el resto de las personas. Esto es lo que queremos rescatar en el libro y transmitir a los niños", explicó Brunet. El polémico libro podría ser parte de las bibliotecas de las escuelas. "Fue presentado en un concurso del Ministerio de Educación" para ser parte de las bibliotecas de las escuelas primarias y fue seleccionado. "Ahora hay que esperar", dijo Brunet, que fue elegida editora del año 2010 por la Fundación el Libro y Capla.

"Recibí mails de personas que me decían: «¿Cómo van a escribir el libro para chicos de un asesino?», o «¿cómo pueden hacer un libro de una persona así?»", contó Brunet. "Pero el Che es un elemento de la cultura universal, como Gandhi, como Martin Luther King, y sí o sí las personas tienen que saber quién es", agregó.

Entre las frases sobre el Che vertidas en el libro, hay algunas como: "Quería cambiar el mundo", mientras se ve a Guevara sosteniendo una estrella y una paloma blanca.

"El Che, Fidel y otros diez camaradas emprendieron en Cuba un combate desigual contra el dictador y su ejército", se afirma en otra parte, mientras una imagen muestra a Guevara blandiendo un fusil con forma de sopapa, que arroja frases. En otro fragmento se habla de los viajes hacia Africa y América de Guevara, "para liderar nuevas revoluciones".

El editor de La Marca señaló que la colección podría incluir a Leonardo Da Vinci, Pablo Picasso, Madame Curi y posiblemente Evita. "Quizá la idea es un poco revolucionaria y vanguardista, pero el Che es un ejemplo en cuanto a sus valores y cualquiera que lea el libro se va a dar cuenta de que fue pensado de esa manera. Todos los personajes históricos son polémicos y me encantaría hacer un libro de Evita", sostuvo el autor.

En la página web de la editorial Marea se promocionan Historia de la homosexualidad argentina, de Osvaldo Bazán, como "el libro que leyeron los legisladores antes de dar el sí al matrimonio igualitario", y Valientes, de Hernán Brienza, como "el libro que la presidenta Fernández de Kirchner le recomendó a Chávez vía Twitter", además de "María Julia, espejo de la corrupción en la argentina" y la historia de Laura Bonaparte, una madre de Plaza de Mayo.

LA NACION
Domingo 13 de febrero de 2011 Publicado en edición impresa

martes, 12 de abril de 2011

24 de marzo - La memoria a medias



Agustín Laje Arrigoni

Cumpliéndose en el día de la fecha 35 años del 24 de marzo de 1976, cabe afirmar que la "memoria" ha desplazado a la historia en lo referido a la lectura que hace la sociedad de los violentos años `70. Se ha enaltecido una supuesta "memoria colectiva" en desmedro de los hechos históricos, cuestión ésta que desde su concepción es errada: la memoria, por definición, es personal y parcial (nadie puede recordar por mí, y lo que recuerdo hoy, además de ser resultado de valoraciones y emociones individuales, lo puedo olvidar mañana o alterar involuntariamente). No existe tal cosa como la memoria del colectivo; lo que existe es el sistemático estudio de la historia, nutrido por hechos y documentos.

El relato oficial de los años `70 se ha valido del eufemismo de la "memoria colectiva" precisamente para dejar fuera de la historia numerosos acontecimientos y circunstancias que, por cuestiones políticas e ideológicas, no resultan convenientes de propagar. La "memoria colectiva" no se trata de otra cosa que del sesgado y manoseado libreto que unos pocos inyectan en otros muchos. Política pura, en definitiva. En este nuevo aniversario del 24 de marzo podrán apreciarse los efectos corrosivos que ha tenido la "memoria" en la historia de los `70. En efecto, en los actos "por la memoria, la verdad y la justicia", nadie mencionará que mientras Isabel era derrocada por las Fuerzas Armadas, el país afrontaba una sangrienta "guerra interna" reconocida de esta forma por la Justicia Argentina en la Causa 13 declarada explícitamente por organizaciones terroristas subversivas contra la República. "Estamos desarrollando una guerra civil concentrando los principales recursos hacia la lucha militar y encarando el enfrentamiento con criterio de aniquilamiento" sostuvo el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) en sus órganos de prensa en febrero de 1975. (1)

"Nuestra estrategia sigue siendo la guerra integral", declararon por su parte los Montoneros en 1973, también durante una gestión constitucional (2). Más aún, nadie en las arengas que hoy se vociferen mencionará que en esa "guerra revolucionaria" las bandas terroristas perpetraron, en el período que va de 1969 a 1979, la cantidad de 21.642 acciones extremistas, guarismo que arroja un promedio de casi seis atentados diarios en ese espacio de tiempo, según los datos de la Causa 13 (Juicio a las Juntas Militares). Las miles de víctimas que fueron consecuencia de esos atentados, por si faltara indicarlo, tampoco estarán contempladas en la "memoria colectiva".

Pero el reemplazo de la historia por la memoria también tiene otros efectos igualmente nocivos, en tanto que el relato oficial de la década del `70 omite advertir que numerosos sectores que hoy se llenan la boca de "derechos humanos", cuando las Fuerzas Armadas tomaron el poder tuvieron una conducta opuesta de cabo a rabo a las banderas con las que ahora se envuelven para hacer política y lucrar. Ejemplo de ello lo constituye nada menos que el Partido Comunista, que en una declaración pública del 25 de marzo de 1976 aseveró: "La movilización del 24 de marzo había sido precedida de una intensa campaña que reclamaba 'rectificar el rumbo'. Efectivamente, era necesario y urgente cambiar el rumbo". (3)

Algo similar podría decirse del Partido Socialista, que no tuvo reparos en comandar la intendencia de Mar del Plata durante el Proceso, o de colocar a uno de sus mejores hombres, Américo Ghioldi, como embajador en Portugal. Semejante es el juicio que cabe sobre destacadas personalidades como Ernesto Sábato, recordado por la "memoria" como uno de los luchadores más infatigables por los Derechos Humanos, pero que la historia lo registró en mayo de 1976 disfrutando de almuerzos con Videla, y calificándolo a este último frente a los medios de comunicación como "excelente", "culto", "modesto", y como "un General con civismo" (4).

En el caso de una figura más destacada en la política actual, como lo es el polémico canciller Héctor Timerman, mientras los "memoriosos" del setentismo aseguran que se trata de un "paladín de los Derechos Humanos", la historia indica que fue nada menos que el director del diario La Tarde, el vespertino que funcionó como una suerte de usina de conspiración que pretendía crear un clima propicio para el golpe. En el diario dirigido por el canciller kirchnerista se vertieron conceptos como "no sólo de elecciones vive la democracia" (5), y se informó que durante el Proceso, la represión al terrorismo era "ajustada a las normas jurídicas" (6), y que había total "vigencia de los Derechos Humanos". (7)

En sus intentos por descontextualizar la historia, la "memoria" también hará caso omiso al estado de situación que reflejaba, a la sazón, la prensa en general. Así, en los actos que tendrán lugar en el día de la fecha, nadie hablará de que el diario La Opinión (de Jacobo Timerman, padre de Héctor) titulaba en una nota de tapa "Un récord que duele: cada 5 horas asesinan a un argentino" a dos días del golpe, poniendo de manifiesto la gravedad de la situación que se vivía. Asimismo, un día antes a ese titular, La Prensa había informado que "Hubo 1358 muertos desde 1973 por acciones terroristas". Y respecto al grado de adhesión popular a la posibilidad de una intervención militar, La Opinión informó el 20 de marzo que "prácticamente un noventa por ciento de los argentinos habla hoy de la proximidad de un golpe de estado".

Son datos que surgen de los documentos de la época, pero que ciertamente están excluidos del historietismo memorioso. ¡Ni qué hablar de la responsabilidad de la dirigencia política en los sucesos del 24 de marzo de 1976! Ello no tiene lugar en la "memoria colectiva", que prefiere creer que el derrocamiento de Isabel fue producto de la maldad de un puñado de generales tan sádicos como chiflados. Luego, el apoyo explícito o tácito de la clase política en general a la intervención militar, registrado en la historia, será borrado sin mayores inconvenientes del discurso oficial. En efecto, no se recordará que la UCR, a través de Balbín, solicitó a Videla que tomara el poder y, además, que el partido declaró que el gobierno constitucional estaba sumergido en "un proceso que por su hondura, vastedad e incomprensible dilatación, alcanza su límite" (8). Tampoco se considerará que, del lado del peronismo, el diputado oficialista Luis Sobrino Aranda de alguna manera llamaba a las FF.AA. indicando al abandonar su banca que "el proceso político argentino está agotado", o que el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Victorio Calabró, fue quien entregó a militares de alto rango mapas de la Casa de Gobierno a los fines de que las tropas del Regimiento de Infantería 7 no se cruzaran con la policía ese 24 de marzo. (9)

El uso político y rentístico que se ha hecho de los años `70, tiene por consecuencia una clara dificultad (cuando no imposibilidad) en la comprensión de qué nos pasó a los argentinos por entonces, sus causas y consecuencias. Mientras la memoria siga estando por sobre la historia, y aquella siga constituyéndose en la piedra angular de un proyecto político de las características del kirchnerismo, feriados como el de hoy no serán más que puro cuento.
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1- Revista El Combatiente. Edición del 17 de febrero de 1975.
2- Revista Militancia, Nº 1, 1973, p. 10.
3- Los comunistas y la nueva situación argentina. Declaración del PC. 25 de marzo de 1976.
4- Diario La Nación, 20 de mayo de 1976.
5- Diario La Tarde, 22 de marzo de 1976.
6- Diario La Tarde, 8 de junio de 1976.
7- Citado en Diario Perfil, 3 de noviembre de 2007.
8- García Montaño, Diego. Responsabilidad Compartida. Córdoba, Ediciones del Copista, 2003, p. 112
9- Yofre, Juan Bautista. Nadie fue. Buenos Aires, Edivérn, 2006, p. 380

Pulicado en:
http://www.lanueva.com/edicion_impresa/nota/24/03/2011/b3o006.html

lunes, 11 de abril de 2011

24-M: fiesta anual de la izquierda fascista



Divulgamos un artículo que consideramos original por su enfoque y brillante por su forma, en el panorama de la prensa argentina. Lo es tanto por la claridad con la que su autor explica la responsabilidad de los medios de comunicación a la hora de escribir "el relato fascista del poder", como por su actualidad en el panorama político de la Argentina gobernada por el régimen gramsciano-montonero Kirchner.

Consideramos que el suceso que inspiró el artículo (los escupitajos a periodistas acusados de “colaborar con la dictadura del Proceso”, durante la Jornada de Odio del pasado 24 de marzo organizada por la fascista izquierda argentina empeñada en reemplazar la historia de los '70 por una surrealista "construcción de la memoria"), lejos de ser una inocente y divertida performance infantil posibilitada por la complicidad de papás y mamás descerebrados, fue una acción de la militancia K; funcional a la estrategia marxista destinada a destruir a la República capitalista y burguesa mediante pedagogías de odio y radicalizaciones del enfrentamiento social. Es decir, a ir haciendo realidad, paso a paso y en un paciente y largo trabajo de adoctrinamiento ideológico, la propuesta gramsciana de conformar un "Bloque social hegemónico cohesionado por valores ideológicos y culturales de raíz marxista", mediante el control de los dos principales instrumentos formadores de la opinión pública: la Enseñanza y los Medios de Comunicación.

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Por un periodismo no fascista

Tomás Abraham

No es cuestión de hacerse los finos y disfrazarnos de epistemólogos. Dos mil quinientos años de filosofía no han podido lograr un consenso sobre qué es la objetividad. Lo que sucede con el periodismo en nuestro país no es parte de esta eterna discusión sobre neutralidad, subjetividad o imparcialidad. Se trata de fascismo. No hay que olvidarse de esta palabra. Hay un capitalismo fascista.

Cuando se elabora el relato fascista del poder, se junta dinero para hacer propaganda mediante un pelotón de mercenarios al servicio de los jerarcas. Frente a ellos no se persignan pegados a un paredón un coro de vírgenes desnudas. Los medios masivos de comunicación no son angelicales: tienen sexo. Constituyen un fenómeno político. Se lo llamaba cuarto o quinto poder. Pero, hace mucho tiempo, una casta de ciudadanos entre el Pireo y Atenas inventó la democracia. Reforzaron la idea en 1668, 1776, 1789 y la extremaron con pobres resultados en 1917.

La idea del inicio no ha variado. Las democracias existen para proteger a la ciudadanía de la arbitrariedad de los poderosos. Los que mandan son los que tienen armas y dinero. Con estos recursos pretenden hacerse dueños de las palabras. Si el mecanismo de defensa de las libertades depende de una burocracia política que distribuye armas y dinero para un bando que la favorece, se desencadena la guerra civil. La erosión suicida no siempre es un fuego fatuo. Puede ser larvada, constituir un murmullo que se agita o se calma de acuerdo con cada ocasión, una provocación para beneficiarse con la furia descontrolada de un adversario enloquecido, una estrategia a mediano plazo para monopolizar la información.

Por eso es beneficioso que, frente al poder instalado en los gobiernos que manejan sin controles la hacienda pública, como sucede en nuestro país, existan polos empresariales poderosos propietarios de los medios. Es un equilibrio necesario ante los ilegalismos impunes que custodian la manipulación informativa desde el Estado. Mejor varios Leviatanes que uno solo. Mientras los gigantes se miran y miden, los pequeños se infiltran y logran hacer lo suyo.

Un Estado democrático es aquel que, frente a una realidad en la que el dinero manda, pone en funcionamiento la ley que hace porosa la estructura de poder de la sociedad. Fomenta la dispersión de las fuerzas de opinión y posibilita la multiplicación de las fuentes emisoras que dan cuenta de la realidad. Hasta el momento, la Web es un medio extraestatal democratizador que ahorra trabajo político vertical, diagramación piramidal y gestión ecualizadora. El fascismo se define por la superposición entre información y propaganda. Se basa en el sofisma de que sólo hay propaganda. Que todo es poder. Que nada hay que no sea poder. De este modo el espacio de la información está marcado por una serie de bunkers ocupados por trincheristas que disparan sus avisos y consignas al éter publicitario. Se hacen llamar militantes u operadores. Son soldados de una causa. Frutos natos de la obediencia debida.

La sociedad se convierte en un auditorio ampliado que se divide en sectas a las órdenes de un gran hermano adorado y protector. Los periodistas adulan a su clientela, a sus ramones y rosas, y éstos los obsequian con sus ofrendas de amor. Esto no es un invento del kirchnerismo y viene de lejos. Lo que hace este gobierno es participar de la fiesta mercenaria y ser uno de sus principales protagonistas. La concentración es un fenómeno mundial como lo es la fusión financiera de medios con otras ramas del mercado de bienes y servicios.

No es en este aspecto que reside la diferencia con otros países. Lo que marca el rasgo distintivo que caracteriza el comportamiento de una colectividad es el promedio educativo de una población y los valores que comparte. El periodismo es una de las ramas de los aparatos educacionales de una sociedad. Es un órgano de producción cultural. Si la sociedad posee instituciones sólidas y variadas de producción de conocimientos y difusión de obras de valor del pasado y del presente, si la investigación de nuevos problemas y el impulso al desarrollo de fuerzas productivas que necesitan de la ciencia y de la tecnología promueven la diseminación de los espacios de creación, discusión y fundamentación de cada uno de los aportes cognitivos, entonces no hay gigante que se coma toda la realidad y la devuelva maquillada. La sociedad se vuelve exigente y no acepta cosas truchas. Es una cuestión de nivel educativo.

Al periodismo no fascista se lo descalifica como liberal. En nuestro país un liberal es un gorila o un oligarca. En otros lugares y otros tiempos, los liberales eran los disidentes que se jugaron la vida para que no hubiera más inquisidores. Así que no tenemos palabras afirmativas para el periodismo no fascista, aquel que aún considera que el análisis de la actualidad sigue siendo una tarea intelectual. Toda tarea intelectual requiere como condición sine qua non multiplicar las fuentes de información. Es polifónica. Compara, puede tomar posición respecto de cada tema, pero lo hace al tiempo que ofrece un abanico explícito de alternativas que dispone en estado polémico. Si su ambición es mucha, hasta puede crear un espacio de pensamiento.

En un reciente documental, Public Speaking, de Martin Scorsese, sobre la escritora norteamericana Fran Leibovitz, ella decía que el mundo de la información estaba apagado. Sostiene que a nadie le interesan las noticias. Todos quieren opiniones. No hay más noticias, hechos, acontecimientos. La opinología que tantos desprecian se ha convertido en la máxima aspiración comunicacional. Se ha perdido el arte de la construcción de la noticia. La demagogia, la moralina y el culebrón no han dejado restos.

Al parecer, a nadie se le ocurre que el periodismo es una de las ramas de la historia y que el periodista contribuye a pensar la historia del presente.

Cuando una sociedad se constituye en un foro de propagandistas se embrutece. Se vuelve imbécil. Escupe afiches. No piensa más. Elige muñecos y los quema. Se regodea en su fanatismo. Acusa a quien sea, de acuerdo a la receta que le entregan los mayordomos del Jefe o Jefa del Castillo. No tiene otro ideal que la servidumbre voluntaria.

http://www.perfil.com/contenidos/2011/04/03/noticia_0003.html
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Como Epílogo de nuestra introducción, no podemos resistirnos a señalar la inquietante analogía que la sesión de escupitajos bajo el lema "escupí tu bronca", organizada por una de las innumerables sectas subversivas financiadas por el gobierno montonero Kirchner, guarda con los terroríficos "Dos Minutos de Odio" contra el enemigo del pueblo Goldstein. Sesiones de catarsis colectiva estimuladora de pulsiones homicidas, que los proletarios esclavos de la "República Socialista de Inglaterra gobernada por el partido-único dirigido por el secretario general Big Brother" estaban obligados a dedicar todos los días para cohesionar políticamente a las masas.

Nos referimos, claro está, a la pequeña gran novela de George Orwell, 1984; que no sólo alegorizó magistralmente la vida cotidiana en la fascista Unión Soviética sino que, por su sorprendente actualidad, ya es un clásico. Muy especialmente, en lo concerniente a la estrategia elaborada por el comunista italiano Antonio Gramsci en los años cuarenta del XX; de la que se alimenta la actual reescritura falsaria de la historia argentina, destinada a conformar una memoria colectiva que omite nada menos que once años de terrorismo marxista contra la población civil y el Estado.

Recomendamos esta imprescindible obra a nuestros lectores; así como su última y difícilmente superable versión cinematográfica: 1984, dirigida por Michael Radford e interpretada por John Hurt, Richard Burton y Suzanna Hamilton

lunes, 4 de abril de 2011

PERÓN - 1974: "Con la Ley o fuera de la Ley"

El presidente Perón tras el ataque del ERP a la guarnición de Azul el domingo 20 de enero de 1974 en el que fueron asesinados el coronel Gay y su esposa, y secuestrado el teniente coronel Argibay. Impresionante retrato de quien ya ha decidido exterminar a la izquierda terrorista.



Transcripción del encuentro celebrado en la residencia presidencial de Olivos, dos días después, el martes 22, entre el general Perón y los diputados de la Juventud Peronista (MONTONEROS) Rodolfo Vittar, Roberto Vidaña, Anibal Iturrieta, Armando Croatto, Carlos Kunkel, Santiago Díaz Ortiz, Diego Muniz Barreto, Jorge Glellel y Julio Mera Figueroa.

Para dar mayor relevancia institucional a ese encuentro, Perón dispuso que fuera retransmitido por Radio y TV a toda la nación; y que le acompañaran varios de sus ministros y los presidentes del Senado y Cámara de Diputados.



El texto, del que hemos eliminado varios párrafos referidos a cuestiones de procedimientos técnico-parlamentarios para centrarnos en lo fundamental (su contenido político), fue reproducido por el diario Noticias, financiado por MONTONEROS con los millones de dólares obtenidos mediante secuestros. De todas maneras, hemos respetado algunos párrafos iniciales para fijar el contexto de la reunión.

No pudiendo sustraernos a la enorme trascendencia histórica de un encuentro en el que Perón expuso los fundamentos de la futura doctrina contraterrorista del Estado, hemos destacado en negrita las frases que consideramos esenciales.

Ya a las 21:30 del domingo 20 en un Mensaje a la Nación; y el lunes 21 en Radiograma G-6777 132/74 enviado a la Guarnición de Azul, había llamado abiertamente a "aniquilar el terrorismo criminal... exterminarlos uno a uno para el bien de la República".
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Perón
Muy bien, señores, ustedes pidieron hablar conmigo. Los escucho. ¿De qué se trata?

Diputado Vittar
Señor General: nosotros queríamos hablar con usted antes de hacerle entrega de un comunicado que hemos sacado repudiando el atentado de Azul. Queremos señalarle nuestros conceptos con respecto a la modificación del Código Penal. La nuestra no es una postura en contra de dicha modificación. Tenemos algunas dudas con respecto a la misma. Estamos de acuerdo en la necesidad de que nuestro Gobierno popular tenga realmente un aparato de seguridad y una legislación de seguridad del Estado popular (sic) pero vemos que algunos de los considerandos no tienen mucha claridad en torno a pautas técnicas legales y políticas. Nosotros aplicamos objeciones a uno o dos artículos y queremos escucharlo a usted, señor General. Por eso le hemos pedido esta entrevista.

Perón
Por lo que veo se trata de un problema interno del bloque. Ahora, es indudable que en los grupos colegiados existe una norma ante la cual funciona y fuera de la cual no debe funcionar. Los grupos colegiados tienen su discusión interna; el concepto de la tarea misma legislativa lo impone, por eso existen los bloques. ¿Cuál debe ser la norma dentro de los bloques? Eso no se discute.

Diputado
En realidad nosotros planteamos la necesidad de una discusión de este tema en concreto, es decir, de la modificación del Código Penal, no sólo en una discusión dentro del bloque, sino también en cuanto a una discusión de todos sus aspectos ante funcionarios del Poder Ejecutivo.

Perón
Yo tengo entendido que hasta han concurrido ministros al bloque para tratar este asunto, y que se ha votado.

El Sr. Pedrini (personaje no identificado. Posiblemente, miembro del bloque de diputados peronistas) interviene para explicarle al general: "En el bloque no se pueden votar de ninguna manera los proyectos del Poder Ejecutivo. Lo que se votó fue la conveniencia o no de que comparecieran en el bloque los tres ministros, esto es, de Justicia, de Interior y de Defensa. Los compañeros de la juventud tienen problemas en dos artículos de la ley, que son Asociación Ilícita y Configuración del Delito".

Perón
Pero si no cometió el delito... en una emboscada de esta naturaleza, asesinando a personas que están tranquilas y en paz. Ahora bien, si esto no implica la necesidad de ser enérgicos a través de la ley, no estaremos jamás respetando la ley desde que la pedimos. El Poder Ejecutivo pide esta ley porque la necesita. Hay treinta asaltos que justificarían una ley dura; sin embargo hasta ahora hemos sido pacientes, pero ya no se puede seguir adelante, porque de lo contrario la debilidad nuestra será la que produzca la propia desgracia del país, que es lo que queremos evitar.
Ahora bien, hablando con toda franqueza, indudablemente no le veo razón a ninguno de los argumentos que vienen exponiéndome para la defensa de la ley. Eso será por la tarea de discutir y buscar triquiñuelas a las cosas. No; aquí hay un fin, el medio es otra cosa.

Diputado
Pero la asociación ilícita podría venir por el solo hecho de estar agrupado en una asociación que no esté legalmente reconocida. Como puede suceder con una agrupación que recién se integra en un sindicato o en una agrupación de base política...

Perón
¿Pero, dónde está el delito?... Por otra parte, esa es la tarea del juez y no de la ley, porque asociación ilícita puede haber en todas las gamas de la delincuencia. Nosotros no podemos hacer de jueces. El delito lo configura el juez. Todo aquel que se asocie con fines ilícitos configura el delito. Ahora, quien debe determinar si el fin es lícito o ilícito es el juez. Por otra parte, no es el objeto mío conversar sobre estas cosas, porque no corresponden a mí. Toda esta discusión debe hacerse en el bloque. Y cuando el mismo decida por votación lo que fuere, ésta debe ser palabra santa para todos las que forman parte de él; de lo contrario, se van del bloque. Esa es la solución.
En esto se debe actuar de la misma manera que actuamos en el orden político. Nadie está obligado a permanecer en una fracción política. El que no está contento, se va. En este sentido, nosotros no vamos a poner el menor inconveniente. Quien esté en otra tendencia diferente de la peronista, lo que debe hacer es irse.
Pero en ese caso (el disconforme) representa ni más ni menos que al Movimiento. Lo que no es lícito, diría, es estar defendiendo otras causas y usar la camiseta peronista.

En este momento, con lo que acabamos de ver, (ERP: Azul) en que una banda de asaltantes que invoca cuestiones ideológicas o políticas para cometer un crimen, ¿ahí nosotros vamos a pensar que eso lo justifica? ¡No!; un crimen es un crimen cualquiera sea el móvil que lo provoca, y el delito es delito cualquiera sea el pensamiento, o sentimiento, o la pasión que impulse al criminal. Siempre que hay voluntad criminal es un delito y eso lo tiene que penar la ley, no nosotros.
Recurrimos a esto porque estamos en un momento crítico para el país; cuando vemos que estos señores en la mayor impunidad y porque no hay con qué sancionarlo, se largan al ataque.

Nosotros estamos en la necesidad de contar con una legislación fuerte para parar lo que se está produciendo, que es también fuerte; y a grandes males no hay sino grandes remedios, que es lo que nosotros necesitamos. En este momento se está asaltando (cuarteles) en nombre de no sé qué cosa. Si hasta han tomado ciudadanos (secuestros y rehenes); ya los ciudadanos no tienen la seguridad que el Estado tiene la obligación de dar, porque no hay sanción en las leyes para este tipo de delitos, que son nuevos. ¿Cómo es posible que todos los hombres que tengan armas estén amenazados de ser tomados por bandas de delincuentes que se dicen de una tendencia o de otra? No interesa la "tendencia", interesa el delito que cometen. No sé, yo no veo otra solución para estas cosas.

Diputado
Yo quiero ratificar nuestra decisión, que es una decisión no sólo ética, moral y muy sentida, sino también en el plano político que es la de permanecer y contribuir en la medida de nuestras posibilidades a la tarea común del peronismo, por una simple razón: porque somos peronistas y no otra cosa. Planteamos también, señor General, una cuestión de orden político. Es una apreciación que es válida en la medida en que usted la admita, y deja de ser válida en la medida que usted tenga otra apreciación.

Perón
¿En qué consiste esa apreciación?

Diputado
Nosotros pensamos, que partiendo de un principio que usted ha manifestado en numerosas oportunidades, y al cual le otorgamos la máxima razón y sabiduría, sostenemos que la violencia es la que se ejerce no solamente a través de los grupos minoritarios de ultra derecha o de ultra izquierda. Son episodios elaborados; no son productos de una generación espontánea, sino productos de una generación que está, de alguna manera, sumergiéndonos a todos en la violencia.

Perón
Entonces, ¿cómo usted evitaría eso?

Diputado
Le voy a contestar con sus palabras: nosotros pensamos eso, que hemos desterrado las estructuras violentas que hacen que esa violencia de abajo sea generada por la violencia de arriba.

Perón
Y a pesar de eso, la violencia continúa cada vez en mayor forma.

Diputado
Sí señor, y ahí se aplica con toda celeridad y con toda decisión el poder represivo del Estado popular.

Perón
¿Y le parece que hemos esperado poco, con todo lo que ha pasado en estos siete meses de gobierno popular y plebiscitario, donde todos esos señores de las organizaciones terroristas se largan a la calle, culminando en este episodio, atacando a un regimiento?

Diputado
¿Me permite, señor Presidente? Precisamente...

Perón
¿Es decir, que somos nosotros los que provocamos la violencia?

Diputado
Consideramos, señor General, lo siguiente sobre este tema: que los lamentables acontecimientos de Azul, a nuestro juicio y a nuestro modesto entender, indican, precisamente, una decisión de estos grupos minoritarios, totalmente ausentes de lo que es un sentimiento nacional y de lo que es la comprensión de la necesidad de unidad del pueblo argentino, en un proceso de reconstrucción. Entendemos que, precisamente, la intención de estos sectores es especular con un clima de violencia, en crear una actitud del Estado, que estos sectores califican arbitrariamente de represiva y es, precisamente, el caldo de cultivo político en el cual se desarrolla su planteo político. Hemos conocido durante años, a través de un enfrentamiento de la dictadura, cuál es la política del ERP, el autodenominado Ejército Revolucionario del Pueblo. Sabemos que su política crece y se desarrolla en un ambiente de violencia.

Perón
¡No! Está totalmente equivocado. Yo a eso lo he conocido "naranjo", cuando se gestó ese Movimiento, que no es argentino. Ese Movimiento (Cuarta Internacional - trotkista) se dirige desde Francia, precisamente, desde París, y la persona que lo gobierna se llama "Posadas", de seudónimo. El nombre verdadero es italiano (Homero Rómulo Cristali Frasnelli, nacido en Buenos Aires, 1912). Los he conocido "naranjo", como dice el cuento del cura. Sé qué persiguen y lo que buscan. De manera que en ese sentido a mí no me van a engañar, porque, como les digo, los conozco profundamente.
He hablado con muchísimos de ellos en la época en que nosotros también estábamos en la delincuencia, diremos así. Pero jamás he pensado que esa gente podría estar aliada con nosotros, por los fines que persigue.
Ustedes ven que lo que se produce aquí, se produce en todas partes. Está en Alemania, en Francia. En este momento, Francia tiene un problema gravísimo de ese orden. Y ellos lo dejaron funcionar allí; no tuvieron la represión suficiente. En estos momentos, el gobierno francés está por tomar medidas drásticas y violentas para reprimir eso que ellos mismos dejaron funcionar. Ya lo he dicho más de veinte veces, que la cabeza de este movimiento está en París.
Eso ustedes no lo van a parar de ninguna manera, porque es un movimiento organizado en todo el mundo. Está en todas partes: en Uruguay, en Bolivia, en Chile, con distintos nombres. Y ellos son los culpables de lo que le ha pasado a Allende. Son ellos y están aquí en la República Argentina, también. Están en Francia, en España, en una palabra, están en todos los países. Porque esta es una Cuarta Internacional, que se fundó con una finalidad totalmente diferente a la Tercera Internacional, que fue comunista, pero comunista ortodoxa. Aquí no hay nada de comunismo; es un movimiento marxista deformado, que pretende, imponerse en todas partes por la lucha.

A la lucha -y yo soy técnico en eso- no hay nada que hacerle, más que imponerle y enfrentarle con la lucha. Y no atarse las manos frente a esa fuerza; y especialmente, no atarse las manos suprimiendo la ley que lo puede sancionar. Porque nosotros, desgraciadamente, tenemos que actuar dentro de la ley, porque si en este momento no tuviéramos que actuar dentro de la ley ya lo habríamos terminado en una semana.

Para nosotros es un problema bien claro. Queremos seguir actuando dentro de la ley y para no salir de ella necesitamos que la ley sea tan fuerte como para impedir esos males. Dentro de eso, tenemos que considerar si nosotros podemos resolver el problema. Si no contamos con la ley, entonces tendremos también nosotros que salirnos de la ley y sancionar en forma directa como hacen ellos

¿Y nos vamos a dejar matar? Lo mataron al secretario general de la Confederación General del Trabajo (Ignacio Rucci, ejecutado por Montoneros, como bien sabía Perón), están asesinando alevosamente, y nosotros con los brazos cruzados porque no tenemos ley para reprimirlos. ¿No ven que eso es angelical?

El fin es la sustentación del Estado y de la Nación; está en que tengamos los medios para defendernos. Si nosotros todavía nos limitamos nuestros propios medios de defensa, estamos entregándonos a estas fuerzas, que, como he dicho, las conozco profundamente y sé cómo actúan.

Ahora bien; si nosotros no tenemos en cuenta a la ley, en una semana se termina todo esto, porque formo una fuerza suficiente, lo voy a buscar a usted y lo mato, que es lo que hacen ellos. No actúan dentro de la ley. De esa manera, vamos a la ley de la selva y dentro de la ley de la selva, tendría que permitir que todos los argentinos portaran armas a la vista. Pero, ¿qué es lo que está ocurriendo? Que los delincuentes están todos armados, mientras que las personas decentes no pueden llevar armas y están indefensas en manos de estos señores. ¿Y todavía nosotros vamos a pensar si sancionamos o no la ley? ¡Vamos! Necesitamos esa ley porque la República está indefensa frente a ellos. Ese es para nosotros el fundamento de todo eso. Con toda claridad afirmo que no queremos la violencia.

Desde hace siete meses estamos diciendo que queremos la paz, y estos señores, en siete meses, no se han dado cuenta que están fuera de lugar, porque no se han dado cuenta que están perturbando lo que ellos dicen que sostienen, que es mentira. La mitad son mercenarios, los conozco, los he visto actuar y por el sólo hecho de que estén mandados de afuera, tienen intereses distintos a los nuestros. Los nuestros no se defienden desde París, se defienden desde Buenos Aires. Para mí, eso es lo que yo veo con toda claridad. Ahora, la decisión es muy simple: hemos pedido esta ley al Congreso para que éste nos dé el derecho de sancionar fuerte a esta clase de delincuentes.

Si no tenemos la ley, el camino será otro; y les aseguro que puestos a enfrentar la violencia con la violencia, nosotros tenemos más medios posibles para aplastarla, y lo haremos a cualquier precio, porque no estamos aquí de monigotes.
Estamos afrontando una responsabilidad que nos ha dado plebiscitariamente el pueblo argentino. Nosotros no somos dictadores de golpes de Estado. No nos han pegado con saliva.

Nosotros vamos a proceder de acuerdo con la necesidad, cualquiera sean los medios. Si no hay ley, fuera de la ley también lo vamos a hacer y lo vamos a hacer violentamente. Porque a la violencia no se le puede oponer otra cosa que la propia violencia. Eso es una cosa que la gente debe tener en claro, pero lo vamos a hacer; no tenga la menor duda

Tenemos la seguridad de que la mayoría absoluta del pueblo nos acompaña, y cuando un Movimiento está apoyado por el pueblo no hay fuerza que se le pueda oponer. De eso estoy totalmente convencido.

En cuanto al problema en sí, es un problema de ustedes y del bloque, y lo tienen que resolver con él y no conmigo.
Tenemos un Movimiento y éste lo maneja el Consejo Superior. Reitero que el problema es de ustedes y del bloque, y yo no puedo interferir con mis ideas; éstas, por otra parte, las acabo de exponer, así como también lo he hecho en cuanto a las necesidades del Estado. Ahora, ustedes pueden resolver lo que quieran. Esa es una cuestión individual en la cual yo no me he metido ni me meto.

Diputado
Nosotros, un poco como soldados del Movimiento y de usted que es el conductor de ese gran Movimiento nacional en la Argentina, le queremos señalar que nuestra entrevista la hicimos en carácter de militantes peronistas. Era fundamental escucharle a usted acerca de lo que realmente pensaba en torno a ese problema, el cual nosotros no cuestionamos globalmente sino en algunos de sus aspectos. Lo que queremos es señalarle y ratificarle, con toda la fuerza que tenemos, que estamos totalmente junto a usted como integrantes del Movimiento Peronista y junto al pueblo. En ese sentido, somos disciplinados en nuestro Movimiento. Fuimos, somos y seremos disciplinados, hasta la muerte. Queremos agradecerle con todo corazón esta entrevista, y estamos muy contentos de estar con usted, de verlo y de escucharlo. Ese ha sido uno de los objetivos que tuvimos para venir a verlo.

Perón
Muy bien, muchas gracias.
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Dos días después, los diputados montoneros renunciaron a sus Actas, y el Consejo Superior Justicialista los expulsó del Movimiento. También fue obligado a renunciar el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Oscar Bidegain, por su conocida vinculación con MONTONEROS: su secretaria privada era nada menos que Norma Arrostito; una de las fundadoras, miembro de su Conducción Nacional, e integrante del comando que secuestró y luego asesinó al general Aramburu.



De esta manera, la izquierda peronista sólo quedó representada en el Congreso por Rodolfo Ortega Peña, quien más tarde sería ejecutado por la Triple A.

El 1º de mayo, se produciría la célebre y espectacular ruptura entre la organización terrorista MONTONEROS y el general Perón en la Plaza de Mayo.

Juan Domingo Perón falleció el 1 de julio de ese año 1974.



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