martes, 13 de diciembre de 2011

PSOE y ETA: España como enemiga común

Martes 13 de diciembre de 2011, inauguración de las nuevas Cortes Generales. El todavía presidente del gobierno Rodríguez Zapatero felicita calurosamente al diputado etarra Xabier Mikel Berrekondo, del partido Amaiur legalizado por el PSOE. Detrás, ministro del Interior Alfredo Pérez Rubalcaba, cerebro de las negociaciones

Desde el retorno de España a la democracia, la derecha liberal-conservadora defendió como estrategia para derrotar a ETA la vía de la persecusión policial y judicial, mientras que el Partido Socialista Obrero Español con su diario El País, y el minúsculo Partido Comunista con su tapadera Izquierda Unida, optaron por apaciguarla mediante concesiones políticas, es decir, por la rendición del Estado.

Como consecuencia de esa estrategia, el PSOE ha negociado durante treinta años con los terroristas mientras condenaba públicamente sus homicidios. La culminación de ese cinismo abyecto acaba de producirse con la delictiva legalización de dos tapaderas etarras que han pasado a controlar 74 ayuntamientos de las provincias vascongadas y a tener siete diputados en las Cortes. Todo ello, con prisas y a escondidas durante los dos últimos meses del gobierno presidido por Rodríguez Zapatero.

En realidad, esta alianza criminal no debe sorprendernos, ya que el marxista-leninista PSOE (aunque diga ser socialdemócrata) desde su fundación en 1879 persigue romper España mediante una estructura federal (nación de naciones), y tiene un largo y sangriento historial terrorista; desde la huelga general revolucionaria de 1917 (93 muertos, 350 heridos) junto con los anarquistas, hasta su propia insurrección armada y golpe de Estado contra la Segunda República en octubre de 1934 que dejó un saldo de 1.377 muertos, 2.954 heridos y 867 edificios incendiados o dinamitados. Primera fase de la guerra civil generalizada que estallaría dos años más tarde gracias a las oleadas terroristas del PSOE y del PCE durante el gobierno del Frente Popular dirigido por la Komintern de Stalin.

ETA, por su parte, que ya acumula 785 homicidios, fue fundada como una organización "político-militar marxista-leninista", y sigue autodefiniéndose en sus comunicados como Organización Socialista Revolucionaria Vasca de Liberación Nacional.


1991, Vic, Barcelona. Coche-bomba de ETA en casa-cuartel de la Guardia Civil. Cinco niños y cinco adultos muertos

Sin duda, este es un mínimo resumen de la alianza política mantenida durante tres décadas entre los socialistas españoles y los etarras vascos, que ofrecemos como un largo "pie" de una fotografía que ha dado la vuelta al mundo. Un documento histórico que corona la obscena y criminal traición del PSOE, a una España que sigue queriendo destruir y a los 785 ciudadanos asesinados por ETA como monedas de cambio.

Termidorianos

No hay comentarios:

Publicar un comentario